Ahora vamos a ver si sabes qué has aprendido de este tema…
Empezamos por ver si sabrías reconocer cuáles de estos daños se reconocen como Enfermedades Profesionales o como Patologías asociadas al ambiente laboral.
Como hemos visto, muchas enfermedades quedan fuera del cuadro legal de Enfermedades Profesionales, incluso cuando están a veces relacionadas con el trabajo en se desenvuelve, ya que para ello debe existir una relación directa y unívoca entre la EP, el agente causante y el trabajo en que se desarrolla. Y cuando no se ve claro, o influyen otros factores, se excluye de la lista, bien como enfermedad común (si no hay relación) bien como patologías no traumáticas asociadas al ambiente laboral, si se demuestra su atribución clara al entorno laboral o a las “conductas inadecuadas” de la empresa, siendo entonces protegidas como Accidente de Trabajo.
Ese cuadro cambia con los años, a medida de la investigación y la sensibilidad social. Por eso, muchas de las que se se catalogaban como enfermedad común, pasan a ser reconocidas como Patología no traumáticas asociada al trabajo. Es lo que pasó con la gripe COVID-19 en los sanitarios o el acoso laboral. Observa el siguiente video que habla del acoso laboral.
Cambiamos de tema. Como sabrás, la empresa está obligada a comunicar los Accidentes de trabajo producidos, cumpliendo una serie de formalismos, documentos y plazos, con el fin de que diferentes organismos con competencias en este tema, estén al tanto y puedan actuar, según el caso.
Veamos si lo has comprendido en el siguiente juego. Recuerda que el tiempo corre cuando se trata de cumplir las obligaciones con los plazos de notificación, así que piensa rápido y dirígete a la respuesta correcta: